No son fáciles de encontrar, pero siempre se pueden ver a la venta en las fiestas populares fuera de los colegios y lugares de peregrinación. Servir en una fuente grande, de 1 metro cuadrado de lado y de 5-6 cm de grosor. Este dulce de Guadalajara se caracteriza por su profundo color rosa mexicano y su consistencia masticable, con sabor a jugo de limón.
Al parecer se desconoce el origen de su receta, y dado que existen muchas recetas de turrones, principalmente de la España original, se desconoce quién los modificó para que adquirieran el color característico que solo se encuentra en Guadalajara, pero este tipo de turrón, como suele ser habitual, alguien cambió. y le dio un tono rosado ya característico para hacerlo más atractivo.
En España se sirve con el té de la tarde. Este es otro postre dulce, pero como buen local aquí, no podía dejar pasar el limón. Y ya en el último día también se añadía piquinchili para convertirlo en un antojo agridulce que alegraba la tarde al salir de templos y colegios.
Hablar de turrón rosa es hablar de tradición guadalajara. Un fabricante de turrones en un triciclo golpea un tubo de automóvil con un machete para cortar dulces para atraer la atención de un goloso. Las personas a las que les gusta este dulce y van a comprarlo de inmediato.
Los ingredientes principales son simples: agua, azúcar y colorante vegetal. Complejo es el proceso de fabricación. Encuentra el punto exacto en el que se debe retirar el turrón del fuego, según los expertos.
Si buscas sobre sus orígenes, es increíble ver cuántas recetas hay en español y mexicano. Sin saber su nombre, o porque la nostalgia no deja tregua a sus caprichos, no saben dónde encontrarlo.
Por: Luis Enrique Alvarado Mendez