Para aprovechar el fin de semana largo y después de su presentación como parte del line up del Festival Vaivén, el domingo 30 de abril se presencio el set que RÜFÜS DU SOL en el Palacio de los Deportes en su regreso a la Ciudad de México.
La fiesta inmensa que se armó traía a Mystery Affair como primer show junto con HVOB, Flight Facilities y el acto principal en su fecha solista en la capital del país, un lugar al que siempre vuelven y cuyo público siempre agradece.
La banda australiana tiene cuatro discos que abarcan 10 años, y la verdad es que no nos imaginamos lo difícil que ha de ser elegir las rolas que formarán parte de un set. Pero esta vez nos la pusieron fácil, porque en vivo incluyeron sonidos de muchísimas canciones aunque toquen poco más de 20 en sus conciertos en solitario.
Es algo raro para una banda de electrónica, pero el cuarteto se rifa en vivo con todos los elementos de sus rolas. La batería de James Hunt aporta muchísimo en el show con remates que no están en las versiones de estudio (es en serio, hasta se avienta solos de percusiones).
Tyrone Lindqvist, con todo y guitarra, también aprovechó para crear sus propios arreglos en “Sundream”. Además de lo bien que sonó su voz en el Palacio, agregar detalles que no se quedaron en la versión del álbum nos hizo escuchar lo que traen en la cabeza los músicos de Sidney.
Como ejemplo, “Solace” incluyó un puente extendido e intenso que no está en la versión de estudio.
Los visuales están coordinados con los sintetizadores principales. Y las luces que cubrían a la banda y al público, reaccionaron con los leads de “Like An Animal” e “Innerbloom” (uno de los momentos más destacados del concierto de RÜFÜS DU SOL).
Debido a que conocen a la perfección sus rolas y los efectos que tienen, la banda pasó de la calma a la intensidad en varias rolas aprovechando los láseres y los centros alrededor de cada integrante.
Dentro de un centro de láseres que rotaban adaptado para cada uno, los australianos tocaron más de 20 piezas de toda su discografía como “On My Knees”, “Like An Animal”, “Make It Right”, “Sundream”, “Make It Happen” y por supuesto, “Innerbloom” y “Treat You Better”.
Con un manejo excepcional del escenario, la banda transmite su particular mensaje de celebrar los tiempos que fueron felices junto a alguien, o bien, cuestionarse sobre su futuro amoroso, incluso pedir perdón.
Los beats nos invitaban a bailar sobre canciones con letras agridulces, y no podíamos quedarnos quietos, ya que RÜFÜS DU SOL tiene todo pensado para ponernos a cantar y bailar al mismo tiempo aunque sea por motivos diferentes, lo cual lo hace más dinámico y emocional como parte de la experiencia.
Por: Eduardo Antonio